“¡A ver cuándo damos lo de Franco, profe!”
“¡A ver cuándo damos lo de Franco, profe!”
Resumen generado por IA
En un instituto del sur de Madrid, los alumnos de primero de la ESO (12 años) muestran un creciente interés y simpatía por la figura de Franco, según sus profesores de Historia. Este interés se manifiesta en pulseras con símbolos franquistas, calendarios, interpretaciones del 'Cara al sol' y peticiones para ver la exhumación de Franco. Los profesores observan que esta tendencia, especialmente entre los chicos, es preocupante, ya que los jóvenes podrían ser fácilmente manipulados.
Este resumen ha sido generado automáticamente por inteligencia artificial y puede contener imprecisiones.
A los tres profesores de Historia del mismo instituto del sur de Madrid los alumnos de primero de la ESO (12 años) los atosigan siempre, desde hace unos años, con la misma, recurrente, pregunta: “¿Y lo de Franco, profe?” “¿Cuándo damos lo de Franco, profe?” El dictador que murió hace exactamente 50 años se ha convertido para muchos estudiantes de este centro, según aseguran estos profesores, no sólo en una figura histórica que despierta un creciente interés, sino una también floreciente simpatía. “Antes, hace 15 años, estaba el facha de la clase, que era el raro, pero ahora es una tendencia casi general, sobre todo entre los chicos, no tanto las chicas. Y estos no se esconden a la hora de proclamarlo”, asegura la profesora Dolores Chincolla, de 56 años, con más de 30 de experiencia enseñando Historia a adolescentes en el aula de un instituto público. Este interés -y esta admiración- se traduce en varias cosas: pulseritas con la bandera de España y el lema de “¡Arriba España!”, calendarios de Franco llevados un poco de tapadillo en el bolsillo, la interpretación con el metalófono en clase de música a espaldas de los profesores del Cara al sol o la petición de conectar en clase a la retransmisión en directo, en octubre de 2019, de la exhumación de los restos de Franco en el Valle de los Caídos. “Se lo puse, claro. Porque era de interés. Pero no me han pedido ver en directo ninguna otra cosa nunca”, comenta la también profesora de Historia del mismo centro Mercedes Medina, de 56 años. Un tercer colega, David Campos, de 29, añade que no pocas veces, cuando les pregunta a sus alumnos de la ESO o de bachillerato que elijan un personaje histórico favorito, muchos eligen al dictador: “Y ninguno a Cervantes”, añade con cierta tristeza. Mercedes Medina agrega, con la misma tristeza pero con algo de prevención en el tono de la voz: “Es una moda. Hubo unos años en los que Franco estuvo muerto, pero ahora ha resucitado”. “Lo malo es que con esa moda, y a esa edad, pueden ser manipulados con mucha facilidad”, matiza Pablo Juárez, profesor de Lengua y Literatura.

Este artículo forma parte del especial de EL PAÍS sobre los 50 años de la muerte de Franco.
¿Qué impacto puede tener esta noticia?
Aumento de la polarización política en las aulas.
Posible influencia de ideologías de extrema derecha en los jóvenes.
Necesidad de revisar la forma en que se enseña la historia en las escuelas.